Aunque no os lo creais estos tres lugares los podemos visitar en un dia, eso si mochila bocata y ganas de disfrutar no os deben de faltar. Nuestra primera parada fue el pueblo costero de Plentzia, que en este época tambien se notó los efectos del pasado temporal. Para poder llegar a este pueblo debemos tomar la autovia direccion Bilbao, una vez pasado Bilbao direccion Getxo y ya por fin los carteles nos indicaran ya Plentzia. La autovia se acaba de repente ya que nos metemos por algun pueblo, (cuidado con los radares que por el pais vasco hay muchos y la mayoria a 80 asi que levantad el pie del acelerador si no quereis recibir una sorpresa en vuestra cosa jajaja) estando nuestro destino a mano izquierda de la carretera.
Paseo por la ria de Plentzia
Teneis buen aparcamiento al lado del puente que vereis a la entrada del pueblo, nosotros dejamos el coche aqui y nos dimos un buen paseo por toda la zona de la ria hasta la playa, donde vereis que hay buen ambiente y bastantes bares para tapear y tomar el vermut.
Monumento en honor al Marino Mercante.
La zona centrica de Plentzia, en si el casco histórico, aunque pequeño tiene su encanto y buenas cuestas que nos haran hacer un poco de ejercicio. Os recomendamos que no os metais por el centro de Plentzia con el coche ya que el GPS se vuelve un poco loco y las calles son muy estrechas siendo a veces dudoso que un coche pase sin hacerle algun regalo.
Casco historico de Plentzia.
Acabado nuestro periplo por Plentzia nos dirigimos al Castillo de Butron en la pronvincia de Gatica a escasos 20 minutos de donde nos encontramos. Para poder llegar volvimos sobre nuestros pasos y en la segunda rotonda que nos encontramos ya teniamos el cartel en morado del Castillo de Butron. Eso si estad atentos a la entrada porque no viene señalizada, es un camino a la antigua usanza carretera estrecha llena de vegetacion que nos hara volver a la epoca medieval.
El Castillo de Butron fue restaurado hace unos años por su antiguo propietario ya que actualmente se encuentra en venta por la cifra de 10 millones de euros, asi que si pensabais que podiais verle por dentro...siento deciros que no. Esta cerrado a Cal y Canto aunque la zona es bien bonita para hacer un picnic, plan que hicimos nosotros llevandonos el bocata de tortilla. Quizas os defraude la zona del bosque ya que personalmente creo que deberian de tenerla mejor cuidada...a parte que hay bastantes personas un poco guarris que no recojen su basura teniendo al lado un maravilloso contenedor. Asi que chic@s si vais...no cuesta nada recojer nuestras cosas y tirarlo...
Castillo de Butron. Fachada principal.
Acceso al Castillo de Butron.
Bosque de los alrededores del Castillo
Fachada trasera del Castillo de Butron.
Cuando acabamos de ver el Castillo, nuestros pasos nos pusieron en marcha camino de Vitoria. Os recomiendo que lleveis un paraguas de emergencia en el coche, ya que generalmente en este lugar suele llover bastante y el único bazar chino que encontramos un domingo abierto se encontraba en la plaza mayor de Vitoria.
El casco historico de Vitoria es merecido de visitar, donde podremos ver varios edificios cuyas fachadas tienen unas pinturas preciosas que no desentonan con el entorno. Cuando nosotros fuimos la parte de la catedral se encontraba en obras por lo que tuvimos que dar un pequeño rodeo hasta llegar a la plaza central. En este lugar os encontrareis con el paisano vitoriano y con el mítico cartel con el nombre de la ciudad para haceros la foto de vuestra visita a la ciudad.
Casco histórico de Vitoria
Pinturas de una de las fachadas.
Plaza mayor. Al fondo a la izq. teneis el cartel.
El paisano vitoriano.
Como veis, en un dia la cantidad de cosas que se pueden hacer y ver de un modo económico. Personalmente el Castillo y Plentzia son lugares muy idóneos para pasar un dia con la familia y mas si os gusta el mundo de la fotografia ya que podreis tomar unas instantáneas bastante buenas de toda la zona.
Y con esto nos despedimos, esperamos que os sirva la informacion y si visitais la zona os guste o al menos lo paseis igual de bien que nosotros.
un abrazo de dos viajeros cantabros.
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